Desde los años 2000 se ha puesto de moda tener un gallinero en la ciudad. Se llaman gallineros urbanos y semiurbanos y han experimentado un enorme crecimiento en la mayoría de las ciudades importantes. Cada vez son más las personas que deciden instalar un gallinero en su jardín, patio o incluso balcón. El objetivo es criar tus propias gallinas para obtener huevos frescos. Hay muchas cosas que saber antes de embarcarse en este proyecto.
¿Pollos como mascotas?
¿Qué es un pollo?
La gallina es un ave doméstica de la familia Phasianidae. La gallina es la hembra del gallo, que es el macho de la especie. El término “gallina” se utiliza a menudo para designar a las hembras adultas de aves gallináceas (Gallus gallus domesticus).
Su cresta es más pequeña que la de los gallos, su plumaje más sobrio que ellos. Sus plumas son generalmente más finas y menos brillantes que las de los machos. También son generalmente menos territoriales y agresivos que los gallos.
Las gallinas se crían principalmente para obtener huevos, aunque algunas razas también se crían para obtener carne. Ponen huevos después de alcanzar la madurez sexual.
Tienen un instinto de anidación, lo que significa que buscan un lugar seguro para poner sus huevos. En condiciones naturales, incuban los huevos hasta que eclosionan.
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Pollos de mascota
La mayoría de las personas que poseen gallinas en áreas urbanas son en realidad gallinas de compañía. También se les llama gallinas ornamentales. Por lo tanto, se crían principalmente para tener compañía y no para producir huevos o carne.
Estas gallinas suelen ser elegidas por su estética, su personalidad dócil y su facilidad para integrarse en el entorno hogareño. Las razas más comunes de gallinas mascota: Silkie, Bantam, Cochin, Serama, Polish, Barbu d’Uccle, Frizzle y Sabelpoot.
Las razas de pollos más comunes.
Hay muchas razas de pollos. Cada uno tiene sus propias características en cuanto a tamaño, color, personalidad y productividad de los huevos. ¡Tener gallinas en un entorno urbano también significa tener tus propios huevos! Las razas de pollos más comunes: Plymouth Rock (Barred Rock), Rhode Island Red, Leghorn, Sussex, Araucana, Wyandotte, Orpington, Brahma, ISA Brown y Silkie.
Tener un gallinero en la ciudad, ¿nueva tendencia?
Las razones de esta tendencia son múltiples. En primer lugar, los gallineros urbanos permiten a los habitantes de las ciudades que buscan la autosuficiencia producir sus propios alimentos. Producción local, ecológica y económica.
Algunos lo verán como un efecto de moda, otros como perteneciente a una categoría de personas llamadas “bobos”; habitantes de ciudades burgueses y bohemios necesitados de la naturaleza.
Finalmente, debido a que las gallinas son animales tan interesantes como lindos, ¡cuidarlas puede ser una experiencia divertida y educativa tanto para adultos como para niños!
¿Cuáles son las normas para tener un gallinero en la ciudad?
Aunque las ventajas de tener un gallinero en el jardín son muchas, es importante subrayar que su instalación debe realizarse respetando algunas normas.
Dependiendo del municipio, puede haber limitaciones en términos de proximidad al barrio: por lo tanto, es importante consultar con su municipio.
La legislación varía dependiendo de la ciudad o municipio. Aquí hay algunos puntos generales a considerar:
> El número de gallinas: algunas ciudades tienen límites estrictos para evitar problemas relacionados con el ruido, los olores y la gestión de residuos.
> un permiso de tenencia: La cría de pollos puede requerir un permiso especial dependiendo de la región.
> la distancia a respetar del vecindario: tiene como objetivo minimizar las molestias al gallinero para los vecinos en términos de ruidos, olores y otras posibles molestias.
> Monitoreo de salud/veterinario: algunas regulaciones pueden requerir atención veterinaria regular para los pollos para garantizar su salud.
> Gestión de residuos: Existen normas sobre cómo gestionar los residuos generados por las gallinas, como los excrementos, para evitar problemas de salud pública.
> El propio gallinero: dependiendo del municipio o región, existen normas de construcción para gallineros, que incluyen dimensiones, materiales y requisitos de seguridad.
Tener un gallinero en la ciudad: ¿buena idea?
Ventajas
> un placer y entretenimiento: la ventaja de tener huevos frescos, considerando a las gallinas como mascotas. Además, las gallinas son fáciles de criar y mantener, incluso para principiantes, y no requieren mucho espacio.
> Un gesto medioambiental responsable: las ventajas de los gallineros urbanos no se limitan al tiempo libre. Dado que los pollos son animales omnívoros, se les puede alimentar con restos de comida como cáscaras de frutas y verduras, cáscaras de huevo y restos de cocina, siempre que se les ofrezcan suficientes cereales, productos extruidos y verduras como complemento.
Al reciclar estos desechos domésticos, los pollos ayudan a reducir la cantidad de desechos que se envían al vertedero y, por lo tanto, reducen las emisiones de gases de efecto invernadero. En el lado del jardín regulan las poblaciones de insectos, caracoles y caracoles. En cuanto a sus desechos y basura sucia, se pueden verter en el contenedor de abono o reutilizar como fertilizante y mantillo para el huerto.
Desventajas
> Contaminación acústica: las gallinas pueden hacer ruido mientras ponen huevos y, contrariamente a la creencia popular, ¡tenga en cuenta que el gallo puede cantar en cualquier momento del día o de la noche! Así que lo mejor es pensar en avisar a tus vecinos antes de empezar… ¡O al menos, prescindir del gallo!
> Mucha limpieza de mantenimiento de los recintos: seguirá siendo necesario, diariamente, proporcionarles agua y alimentos frescos y limpiar su casa con regularidad. Sigue siendo necesaria una limpieza periódica del gallinero y del recinto: además de los malos olores relacionados con la acumulación de excrementos, los restos de comida podrían atraer roedores y otros parásitos al vecindario.
A pesar de estas pocas limitaciones, las ventajas de tener un gallinero en la ciudad superan con creces las desventajas. Cada vez más ciudadanos de todos los ámbitos de la vida se sienten atraídos por la idea de tener sus propias gallinas como mascota.
Dieta especifica
Tener tu propio gallinero en la ciudad también significa conocer tus necesidades dietéticas específicas.
Antes de realizar cualquier acción, busque el consejo de un veterinario. Necesitará pienso industrial en forma de pellets, algunos de los cuales están destinados a gallinas en crecimiento, ponedoras y como mascota.
Incluya también cereales integrales como maíz, trigo, cebada y avena. Estos cereales pueden formar parte de su dieta, pero no deberían constituirla toda. es importante variar con verduras (lechuga, zanahoria, espinacas, calabacines) y fruta fresca (manzanas y bayas). Son una excelente fuente de vitaminas y minerales. También son interesantes las hierbas aromáticas frescas como la menta, el perejil y la albahaca. Agregamos proteínas con gusanos de la harina, lombrices de tierra, huevos cocidos.
Para garantizar cáscaras de huevo saludables, las gallinas pueden alimentarse con sus propias cáscaras de huevo trituradas. Esto proporciona el calcio necesario para la producción de huevos.
Finalmente, al igual que los compostadores, ¡a las gallinas les encantan las sobras de la mesa! De vez en cuando puedes darle sobras de carne cocida, pasta, arroz cocido, queso (en pequeñas cantidades) y sobras de verduras.