La raza se remonta a los perros que acompañaban a los habitantes de Sibera hace más de 12.000 años. Cuando estos pueblos se transformaron en los esquimales actuales, utilizaban los lobos locales para la cría posterior.
Su patas se encuentra bien empenachada, sus dedos se encuentran cubiertos de pelos y sus almohadillas son fuertes y grandes.
Son extremadamente fuertes los maxilares, su cabeza es ancha, robusta y tiene forma de cuña.
Sus orejas son pequeñas y triangulares, casi nunca se congelan. Su cola es grande y espesa y se enrolla sobre su dorso y lo protege la cara cuando duerme.
La altura hacia su cruz es de 56 a 64cm, y tiene un peso de 30 a 32kg. Su esperanza de vida es de 13 años.