Antes de comenzar con el baño, coloca las toallas o lo que necesites a mano.
En la base del fregadero o bañera coloca un tapete de goma para evitar que el perro se resbale y se sienta seguro.
Nunca coloques algodón en sus oídos. El algodón actúa como una mecha, y hace llegar el agua hasta los oídos. Tienes que ser muy cuidadoso y trata de que no le entre agua en los oídos.
Usa ropa vieja.
Asegúrate que no pasen los pelos del animal hacia el drenaje.
Por más que el champú indique «enjabonar dos veces», realmente no es necesario, a no ser que haya pasado mucho tiempo de su último baño y se encuentre increíblemente sucio.
Siempre cepíllalo y desarma todo los nudos del pelaje antes del baño. En caso de que el pelo se encuentre muy anudado, tienes que acudir con un profesional.
La mayoría de los perros solo necesitan un baño al mes. Ya que bañar muy seguido a un perro puede secar su piel y el pelaje.
Lo ideal es que acostumbres a tu mascota al cepillado y al baño desde cachorro.